Paradojas del "primer" mundo

Hoy se me olvidó el paraguas
La gente sin paraguas huía despavorida hacia la seguridad de sus hogares...corrían como si lloviera ácido sulfúrico, y no se si corrían porque llovía o porque no sabían hacer otra cosa. Yo decidí sin embargo dar gracias a Dios porque llovía, y pasear hacia mi casa sin prisa alguna, gozando de la lluvia sobre mi pelo, gozando de mi descuido a la hora de esquivar los charcos, de mi sonrisa cuando los coches me mojaban al pasar...

Cuando por la mañana salgo de casa, la gente también huye despavorida. Todos corren (corremos) hacia el trabajo y las obligaciones...todos llegamos tarde hacia ningún sitio sin reparar en que la muerte nos espera igualmente a la vuelta de la misma esquina. Todos huyen con prisa, quizás no corren para llegar pronto al trabajo, sino para huír de si mismos.

Nos pasamos la vida estudiando para tener un trabajo, nos pasamos la vida trabajando para tener dinero para comprar cosas, y como siempre estamos trabajando no tenemos tiempo de dsfrutar las cosas que compramos. Producimos comida suficiente para que todo el mundo pueda comer...pero comemos sólos porque no tenemos tiempo de ir a comer con nuestra familia. Manejamos móviles para llamar a nuestro socio de pekín o a nuestro amigo que está de erasmus, pero no tenemos tiempo de hablar con nuestros padres, y nos quedamos callados cuando compartimos el reducido espacio del ascensor con el vecino hasta la planta baja.

Conocemos con exactitud la pfundidad del océano pero nuestras vidas son completamente superficiales; podemos ver el mundo entro desde el google de nuestro ordenador, pero no tenemos tiempo de viajar con nuesros mejores amigos; llevamos gafas de marca, pero no vemos al hombre que cada día pide en la puerta del Mecadona; nos gusta ser libres para hacer lo que queramos, pero citicamos a todos los que no hacen lo mismo que nosotros; elaboramos políticas de desarrollo y decimo "cógelo, si te lo van a cobrar de todas formas"; queremos follar sin compromiso pero nos sentimos profúndamente sólos; nos quejamos de que la Iglesia critique el condón, pero despué nos nos lo ponemos; investigamos en contra del Alzheimer y bebemos para olvidar cada fin de semana; no nos saludamos por la calle, pero nos agregamos al "twenti"; somos progres pero matamos por comodidad; no vamos a votar porque es domingo, pero no nos perdemos el partido; no queremos que nos discrminen por ser gays, pero solo salimos por "chueca"; no nos gusta la Iglesia pero queremos casarnos de blanco; nos quejamos de todo pero no hacemos nada...

En definitiva, somos potencia mundial, y seguimos siendo monos con piedras, solo que ahora nos hacemos la depilación láser.